14 novembre 2011

Dormir bien ayuda a recordar las obligaciones del día siguiente



Los autores de la Universidad de Washington (Estados Unidos) sostienen que las personas que duermen tras procesar y almacenar una memoria logran mejor sus objetivos que aquellos que quieren ejecutar su plan antes de un buen descanso. Los resultados del estudio fueron publicados en la revista Psychological Science.
Michael Scullin, el autor principal, estudia la memoria prospectiva. A diferencia de la memoria retrospectiva, que consiste en recordar aquello que sucedió, la memoria prospectiva sirve para tener en cuenta los proyectos a futuro, es decir las actividades que una persona quiere realizar más adelante. Estas tareas pueden ser desde tomar un remedio hasta comprar un regalo o pasar por la verdulería antes de ir a casa.
Scullin aseguró que se realizaron muchas investigaciones en torno a la memoria retrospectiva, pero la memoria prospectiva cuenta con un menor nivel de análisis aunque las personas la usan a diario.

DESCANSO Y RECUERDO
En su estudio, los investigadores descubrieron que dormir facilita la ejecución de las tareas a futuro. Explicaron que la habilidad para cumplir una intención parece no depender de la firmeza de la intención sino del disparador que recuerda que se debe cumplir la labor. Este disparador puede ser una situación, lugar o circunstancia que trae a la memoria el plan a realizar.
Por ejemplo, si un hombre debe decir algo a un colega al día siguiente, verlo en el trabajo será el disparador principal para recordar qué le tiene comentar. Pero también hay disparadores más débiles. En este caso, pasar por la sala de conferencias donde ambos se encontrarán en otro momento también podría traer el recuerdo del mensaje que se quiere transmitir.
Scullin explicó que dormir actúa sobre estos disparadores débiles, fortaleciendo la asociación y por lo tanto facilitando el cumplimiento de la intención. Por el contrario, el sueño no robusteció la relación entre la actividad y el disparador más explícito. “Encontramos que el sueño beneficia la memoria prospectiva al fortalecer las asociaciones débiles en el cerebro, un hecho que no se había comprobado antes”, concluyó Scullin.

Gimnasia para los ojos



“Aunque son cien veces más potentes de lo necesario, hay que ejercitarlos para mantenerlos en sanos y en buena forma”, advierten los expertos de Transitions Optical (www.transitions.com), que aconsejan realizar una serie de ejercicios para cuidar la vista y sólo requieren dedicarle unos minutos diariamente.
Al despertarse por la mañana, los expertos de Transitions recomiendan sentarse erguido en la cama, con la cabeza mirando al frente. Hay que frotar las manos con energía hasta que se calienten y colocar las palmas ahuecadas sobre los ojos cerrados, y realizar un masaje suave sobre los ojos con movimientos circulares, aplicando una leve presión con las palmas mientras respiras profundamente durante 15 a 30 segundos.
Los expertos en óptica de Transitions también sugieren realizar ejercicios oculares en el trabajo: sujetar un lápiz delante de uno con el brazo extendido. Acercar lentamente el brazo a la nariz y seguir el lápiz con los ojos hasta que ya no se lo pueda enfocar. Hay que repetir este ejercicio cinco veces y, cuando se termine, parpadear rápido varias veces, cerrar los ojos y relajarse.
Antes de dormir se sugiere colocar los dos primeros dedos de cada mano en la frente, encima de las cejas, donde se note una ligera hendidura, aplicar un masaje suave con ambas manos realizando un movimiento circular durante 20 segundos. Después, deslizar las yemas de los dedos por la frente y seguir el contorno de las cuencas de los ojos.
En www.entrenatuvistasana.com se puede encontrar además otras tablas de ejercicios, que aplican técnicas que han venido empleándose para mantenerse en forma el cuerpo humano y que también son provechosas para la buena salud visual.
“La gimnasia ocular fortalece los músculos y mantiene ágiles los ojos, su realización metódica es una práctica de reeducación visual que permite mejorar la funcionalidad de los ojos y mantiene la capacidad visual en buen estado”, señala el doctor Miquel Magrau Bartis (www.masgrau.net), que combina la medicina general con la medicina tradicional oriental.
Omar Goncebat.
EFE-REPORTAJES.
“La gimnasia ocular fortalece los músculos y mantiene ágiles los ojos, su realización metódica es una práctica de reeducación visual que permite mejorar la funcionalidad de los ojos y mantiene la capacidad visual en buen estado”, señala el doctor Miquel Magrau Bartis
“Aunque son cien veces más potentes de lo necesario, hay que ejercitarlos para mantenerlos en sanos y en buena forma”

7 novembre 2011

La revolución de las hormona

Por Adriana Balaguer | Desesperadas – mar, 1 nov 2011 11:27 ART

Vivimos responsabilizándolas de tantos males…De nuestro mal humor, de esos kilitos de más o de menos, del calor que nos carcome, del frío que nos atraviesa, del cansancio… Las hormonas siempre son las culpables, es que no hay proceso del organismo que no esté regulado, en alguna medida, por ellas, por lo tanto, son la excusa perfecta. Y no hay una edad para que hablen, pueden hacerlo a lo largo de toda la vida.

Cuando todo va bien, el organismo funciona como un relojito, pero si hay una carencia o un exceso en la  producción hormonal, el desequilibrio es inmediato.  Aunque no siempre el desbarajuste es producto de un problema, la mayoría de las veces es producto de  la edad.
Saber a qué atenernos  ayudará a que identifiquemos determinadas reacciones y situaciones personales:
De los 11 a los 19: entre los 8 y los 14 años, las hormonas hipotalámicas marcan el inicio de la pubertad. Los ovarios y los testículos empiezan a segregar hormonas sexuales y los cambios se suceden a diario, tanto en lo físico como en lo anímico.
A los 20: el mapa hormonal  ya se ha estabilizado.  A esta edad, el síndrome premenstrual y los dolores menstruales son los motivos más frecuentes de consulta médica. Sobra energía y libido, las relaciones de pareja son más estables, y el uso de anticonceptivos suele inhibir y hasta imitar la acción de algunas hormonas.
Treintañeras: para las mujeres es una época difícil. El reloj biológico empieza a jugarnos en contra. Si decidimos ser madres, el embarazo será otra gran revolución hormonal de nuestra vida. Además, se pierde tono muscular y se acumula grasa con más rapidez. La piel también dice lo suyo: pierde ácido hialurónico y colágeno, lo que significa que estará menos tersa y radiante.
Cuarentonas: muchas mujeres ingresan en esta etapa en la perimenopausia, periodo de tránsito hacia la menopausia en el que descienden los estrógenos y la progesterona. A partir de los 45, puede haber insomnio, sofocos, disminución del deseo sexual. Definitivamente, la grasa se concentra en el vientre y las caderas.
A partir de los 50: Si nuestros óvulos no han dejado ya de producir estrógenos, están a punto de hacerlo. Hay más sofocos, palpitaciones, irritabilidad, y se pierde cierto blindaje contra las enfermedades del corazón. Los huesos se vuelven más porosos. Ya ha empezado la menopausia. El dato alentador: la vida sexual mejora porque se pierde el miedo a quedar embarazada. Algo bueno tenía que pasarnos….
Superado el impacto de estos párrafos, les aconsejo ponerse el mejor vestido, los zapatos más increíbles, y salir. Otra cosa, mirarse de reojo en las vidrieras ayuda más que hacerlo en el espejo del vestidor.
¿En qué trance hormonal está tu vida?